Uno de los grandes debates actuales es la contaminación, son muchas las personas concienciadas con los problemas del medio ambiente y cada vez se buscan más recursos para frenarlos.
La energía solar es siempre una de las ideas que se viene a la cabeza cuando piensas en ayudar al medio ambiente y, ¿por qué? Pues bien este tipo de energía ayuda al ecosistema de las siguientes formas:
- Reduce la contaminación, es la gran ventaja de esta energía que obtenemos del sol, se debe a que ayuda a disminuir la contaminación de la atmósfera. Esto se debe a que no utiliza combustibles fósiles, a diferencia de la energía eléctrica que todos conocemos. En los hogares en donde se utiliza la energía solar se ahorra hasta 20.000 toneladas de gases que causan el efecto invernadero en la atmósfera.
- Sin combustibles, ¿que quiere decir esto? Para transformar los rayos de sol en electricidad no hace falta ningún consumo de combustible. Solo se necesita una instalación con placas solares y baterías. De esta manera, la energía consumida no sólo no contamina, sino que proviene de una fuente inagotable que no provoca ningún impacto en el planeta.
- No daña los ecosistemas, para poder obtener fuentes de energía de tipo tradicional, se recurre a la destrucción de ecosistemas, por ejemplo, con las instalaciones eléctricas o centrales nucleares, que además tienen un gran impacto en todo lo que les rodea. En cambio, los paneles fotovoltaicos, no dañan el ecosistema ya que se pueden colocar sobre cualquier superficie.
- El calentamiento global, uno de los mayores problemas hoy en día, dado que la energía solar es limpia y económica, ayuda a combatirlo.
- No tiene contaminación sonora, es otro aspecto importante, a diferencia de otros métodos para obtener energía, los paneles fotovoltaicos no producen ruido, todo lo que rodea a este tipo de instalaciones no se verá afectado, ni a nivel contaminación, y tampoco, a nivel de ruidos.
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